La Paz.- Quienes desean experimentar lo que es pernoctar en una nave espacial tienen una experiencia bastante parecida en los llamados Hoteles cápsula, que cuentan con camas al más puro estilo de una película de ciencia ficción.
Esta modalidad acaba de llegar La Paz, de la mano de la emprendedora familia Hernández Lima, que dieron vida al hostal ‘Prado capsule’, ubicado en el mismo centro de la ciudad boliviana.
Cuenta con 44 camas cápsula de acero de uso individual distribuidas en ocho habitaciones, con un sistema que no permite que los sonidos de la calle perturben el descanso del huésped.
Cada una posee una televisión por cable, wifi, una caja fuerte con clave de seguridad personal, un espejo circular, un moderno sistema de ventilación, enchufes, puertos USB para recargar dispositivos, extintor de incendios y luces de lectura que cada cliente puede regular a su gusto.
En algunas habitaciones hay hasta 12 de estas cápsulas blancas, a las cuales se debe ingresar sin zapatos y sin comida, y en el mismo recinto se encuentran los baños, que compartirían los inquilinos de ese cuarto.
No obstante, también hay habitaciones con dos, si el viajero quiere un poco más de privacidad.
El ‘Prado capsule’ también cuenta con áreas comunes para comer y un bar, que no desentonan con el estilo futurista de las minihabitaciones, cuyos precios son mucho más baratos que los hoteles tradicionales de la zona.
La tarifa incluye solamente el desayuno, pero en sus instalaciones se ofrecen aperitivos, bebidas y meriendas a la carta.
Por otra parte, si el cliente quiere una cama común, el hostal ofrece dos habitaciones con camas matrimoniales, habilitadas con mininevera, microondas, sala de estar y baño.
También se oferta el servicio de ‘hospedaje express’, destinado a todas las personas que no pueden regresar a mediodía a sus casas y quieran descansar por un par de horas, tiempo mínimo de alquiler.
REGALO ESPECIAL DE CUMPLEAÑOS
Entre los primeros clientes del hostal, inaugurado el pasado 18 de junio, se encuentra Rose Mary García, quien buscaba una experiencia diferente para celebrar su cumpleaños 54.
‘Me enteré por los medios de comunicación y me encantó la idea’, comentó en exclusiva con Prensa Latina.
‘El lugar es difícil de encontrar porque no da directamente a la calle, pero gracias a mi hijo pude dar con él. Yo quería despertar en un lugar diferente en mi cumpleaños, y la experiencia de dormir en la cápsula fue excelente’, declaró.
De acuerdo con la administradora del lugar, Célica Hernández, se inspiraron en los hoteles cápsulas de Japón, donde comenzaron a utilizarse desde la década de los 80 del pasado siglo, aunque conocen que se implementan en países tan dispares como España, Singapur, Francia, Australia, Croacia, Bélgica, Rusia, Tailandia y Suiza.
‘Nos tomamos dos años en hacer realidad el sueño, pues queríamos dedicarnos a la hostelería, pero no queríamos algo tradicional, porque el centro de La Paz cuenta con varios hoteles. Tras decidirnos por esta modalidad, estuvimos todo un año entre el proceso constructivo y la puesta a punto del local’, explica Hernández.
‘Nuestro espacio tampoco era mucho y antes de poner literas escogimos las cápsulas, que además ofrecen mayor comodidad y privacidad. Fueron 10 toneladas de equipamiento que ensamblamos como si fuera un juego de lego’, añadió.
Además del hostal en sí, la instalación también ofrece el alquiler de una sala de reuniones para la realización de talleres y eventos, otra alternativa para aprovechar su privilegiada ubicación, en la calle 16 de julio (Prado), esquina a Colombia.
‘De momento funcionamos con solamente ocho trabajadores, pero para lograr la satisfacción de nuestros huéspedes sabemos que cuando aumente el flujo necesitamos más personal’, indicó.
Por último, quiso recalcar que los trabajadores los seleccionó de la bolsa del Ministerio de Trabajo, y se mostró complacida con la elección en cada caso por su preparación y conocimientos.
En Latinoamérica es relativamente nueva la idea y tras inaugurarse el primero en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México hace dos años, la experiencia se ha replicado en otras naciones de la región, como Perú y Chile.
Sin embargo, para los paceños es toda una novedad, y en general para los bolivianos, pues entre sus primeros clientes se encuentran viajeros de Tarija, ciudad ubicada al sur, a unos 700 kilómetros de La Paz.
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