abril 17, 2024

El Centro Pedagógico y Cultural Portales y la organización bibliotecaria en Bolivia


Por Luis Oporto Ordóñez -.


Hace poco la Fundación Simón I. Patiño, con sede en Ginebra, decidió cerrar las actividades del Espacio Patiño en Santa Cruz de la Sierra, motivando la protesta de sectores culturales del país. No siempre fue así pues a través del Centro Portales organizó seminarios nacionales que fueron tejiendo, una a una, las bases de la bibliotecología boliviana. El contexto histórico en que inició sus actividades muestra que no fue tarea fácil pues empezó en época de apertura progresista (1970-1971), ensombrecida por la larga noche de la dictadura del Cnl. Hugo Banzer (1971-1976).

Una de sus primeras actividades fue el Curso Audiovisual de Bibliotecología de la UNESCO. Preparado por el profesor Roberto Juarroz (1925-1995) de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, introdujo la bibliotecología científica a la praxis bibliotecaria del país: “primero, el vuelco de la preferencia del sistema de clasificación hacia la Clasificación Decimal Dewey” y segundo, el énfasis puesto en el trabajo de referencia, que contó con la participación de los profesores Ángel Fernández, Emilia Sabor, Emma Pascuala Linares y Rosa Andreozzi (1912-2007), formando los primeros bibliotecarios en Administración bibliotecaria, Catalogación y clasificación, Circulación y préstamo, Referencia y extensión bibliotecaria. Ese fue el principal caldo de cultivo donde germinaron las ideas de creación de la Carrera y a su vez la base natural para la reorganización de las Asociaciones de Bibliotecarios. [1]

El curso —monitoreado por Víctor Hugo Laredo, Efraín Virreira (1930-2014) y José Roberto Arze— fue replicado en Oruro para la Asociación de Bibliotecarios (1972) y maestros (1974) y en Uncía (1975) [2] y 16 cursos a nivel nacional: 6 en Cochabamba, 3 en La Paz, 2 en Oruro, 2 en Potosí, 1 en Sucre, Trinidad y Tarija. Fue una época excepcionalmente proactiva para el Centro Portales, que lideró iniciativas de capacitación, razón por la que fue calificada, con justicia, por el Director de la Biblioteca Central de la Universidad Mayor de San Simón, Mario Estenssoro, como “entidad que se constituyó en núcleo de irradiación formativa de bibliotecarios en Bolivia”.

El Centro Portales llenó el vacío estatal sobre el desarrollo de las bibliotecas públicas y la carencia de políticas, convocando a tres importantes encuentros de bibliotecarios:
Primer Seminario de Bibliotecología para directores y responsables de bibliotecas de Bolivia (20-25 de julio de 1970). Fijó pautas y estrategias para una política bibliotecaria nacional: encarar el Planeamiento Sistemático de los Servicios Bibliotecarios; dotar recursos económicos a las Bibliotecas; crear Bibliotecas Escolares y Públicas para apoyar la lucha contra el analfabetismo; crear la Escuela Nacional de Bibliotecología; designar como bibliotecarios a personas técnicamente capacitadas; establecer justas remuneraciones para el bibliotecario; promover el hábito a la lectura incorporando la asignatura “Introducción a la Bibliotecología” en el plan de estudio de ciclo medio; reorganizar la Asociación Boliviana de Bibliotecarios y, dejar sin efecto el proyecto de fusionar la Biblioteca del Congreso Nacional a la del Ministerio de Educación y Cultura.

Primer Seminario de Bibliotecas Universitarias de Bolivia (29 de marzo-1 de abril de 1971). Incorporó recomendaciones para llevar las bibliotecas a sectores empobrecidos y marginados: “Crear el Departamento de Bibliotecas en las universidades; equiparar las funciones del bibliotecario a las del sector docente; promover la formación de bibliotecas populares en las minas y el campo; auspiciar por medio de la Asociación de Universidades Bolivianas, la creación del Consejo de Bibliotecas Universitarias”.

Primer Seminario sobre Bibliotecas Públicas (29 de septiembre-2 de octubre de 1971), se desarrolló en el gobierno dictatorial del Cnl. Hugo Bánzer Suárez, de tendencia claramente fascista, por lo que destacan recomendaciones de carácter político (énfasis nuestro): Crear bibliotecas públicas en cada Departamento de la República; asignarles una partida presupuestaria a partir de 1972; incorporar el Planeamiento Bibliotecario dentro del planeamiento educativo del país; propender a una Legislación Bibliotecaria Nacional; encomendar a la Asociación de Bibliotecarios de Chuquisaca organizar el Primer Congreso Nacional de Bibliotecarios de Bolivia y reorganizar la Asociación Boliviana de Bibliotecarios; solicitar el normal y permanente funcionamiento de la Escuela de Bibliotecarios de la UMSA; solicitar la inamovilidad funcionaria de los bibliotecarios del país; ejecutar el Plan para el Desarrollo de los Servicios Bibliotecarios de Bibliotecas Públicas y Escolares de Bolivia, elaborado por el Prof. Italo Mettini; realizar la Campaña Nacional de Promoción del Libro, la Lectura y la Biblioteca en el Año Internacional del Libro (1972); solicitar la reapertura de las Bibliotecas universitarias (que) cumplen funciones de Bibliotecas Públicas.

Con esas bases, el Centro Portales, encaró la capacitación de recursos humanos y organización de bibliotecarios, por medio del Seminario Nacional sobre Formación Profesional del Bibliotecario en Bolivia (30 de julio-3 de agosto de 1973) que recomendó: “Solicitar a la Facultad de Humanidades de la UMSA, la más pronta organización de la Carrera de Bibliotecología, con la aprobación de sus programas y la designación de un especialista como Coordinador; presentar el curriculum al Consejo Nacional de Educación Superior y a la Facultad de Humanidades de la UMSA; capacitar a los bibliotecarios en ejercicio sin título en los cursos del Centro Portales y en el curso básico de la Carrera de Bibliotecología de la UMSA; formar bibliotecarios de tipo general; adoptar los manuales de otras Escuelas de Latinoamérica en la UMSA; solicitar la cooperación de entidades internacionales; formular el Estatuto profesional del Bibliotecario que incluya a titulados y bibliotecarios en ejercicio sin título; crear la Dirección Nacional de Bibliotecas; organizar, un Seminario Nacional sobre Formación profesional de Archivistas de Bolivia”. En ese seminario se recomendó al Consejo Nacional de Educación Superior, “se estudie el pronto establecimiento de la especialidad de Archivística en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca”.

La Fundación Simón I. Patiño, a través del Centro Portales, impulsó las bases y políticas de desarrollo de la Bibliotecología y las Bibliotecas en Bolivia, siendo el cierre de sus actividades culturales en Santa Cruz, un precedente que empaña esa brillante trayectoria.


1 José Roberto Arze (2011): “Roberto Juarroz y su contribución a la Bibliotecología boliviana”, en: Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 12 (17: 15-18).

2 Adolfo Espinoza Aliaga (1998): Acción bibliotecaria. Ensayo monográfico sobre la Asociación de Bibliotecarios de Oruro, fundada el 3 de julio de 1969. Oruro, Editora Gráfica Andina.

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