por: Inti Tonatiuh Rioja Guzmán
El pasado 5 de febrero la Ley de la Juventud cumplió un año de su promulgación, su construcción contemplo trece años de esfuerzos por parte de las y los jóvenes e instituciones involucradas en el proceso político, social, cultural e inter generacional.
En el año de su vigencia identifico que la norma enfrenta dos problemas que dificultan su aplicación integral; el primero recae en la falta de conocimiento por una gran parte de la juventud a la misma.
El origen es la carencia de una estrategia de socialización por parte de las instituciones encargadas y así darla a conocer masivamente mediante medios de comunicaciones tradicionales y digitales.
Como activista político colabore con la construcción de la norma y posteriormente pude acompañar al Comité Plurinacional de la Juventud [1] en el desenvolvimiento legal y político al interior de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
Por tales motivos fui invitado por organizaciones juveniles de diferentes tendencias para que compartiera mis reflexiones sobre aquel proceso. Siempre empezaba mi disertación preguntando a los asistentes si conocían y/o habían leído la norma, en su mayoría existía un desconocimiento de la misma, incluso por parte de activistas políticos.
Otro medio por el cual constate la ausencia de conocimiento fueron las redes sociales Facebook y Twitter, preguntando a un centenar de contactos si habían podido revisar la norma, la respuesta era el desconocimiento de tal ley, por lo que obviamente no habían podido leer los contenidos y concientizarse sobre los nuevos espacios que habíamos conseguido al interior del Estado.
El segundo problema tiene directa relación con el primero, el mismo recae en la despolitización, considero que nuestra generación –jóvenes de 16 a 28 años — sufrió este fenómeno político tras la ola neoliberal y sus efectos nos pasan la factura todos los días.
La gran mayoría de las y los jóvenes en nuestro país viven en la luna, principalmente, por qué están desconectados de la realidad bloqueando así toda capacidad de incidencia sobre la misma.
La despolitización es tan extrema que las y los jóvenes que se dedican a realizar actos políticos son vistos como si fueran una “especie” rara al interior de la generación, alienígenas que se debe tener cuidado por que son “politiqueros” pero no hay que dejar de lado por que si llegan a ocupar un cargo podrían dar “pega”.
Personalmente me ha tocado muchas veces responder a personas cercanas que realizo política no por un reconocimiento o algo a cambio, más al contrario, por que estoy consciente que soy útil a mi pueblo si soy activo, reflexivo, critico, movilizado y honesto es decir, si tengo una mirada política de mi realidad.
Estos dos problemas perfilan una posible situación crítica que pondría en riesgo el futuro de muchos esfuerzos hoy en día, entre ellos el más complicado seria ver frustrado la consolidación de nuestro Estado Plurinacional que logre incluir a las voces que históricamente fueron relegadas, como así también las actuales que recién empiezan a ascender.
Precisamente, contemplo que la Ley de la Juventud entra en este contexto como la iniciativa coordinada entre el Estado y los movimientos juveniles para redireccionar la potencia de la juventud, revertir y transformar viejos paradigmas y alcanzar acciones conjuntas en la unión de las fuerzas.
Entre los espacios que ayudaran a consolidar los objetivos propuestos por la norma se encuentra el Sistema Plurinacional de la Juventud que viene a estar compuesto por el: Consejo Plurinacional de la Juventud, el Comité Interministerial de políticas públicas de la Juventud y la Dirección Plurinacional de la Juventud.
Estos tres espacios construirán un mega aparato institucional otorgando más inclusión al Estado y transversalmente darán la oportunidad de construir y elaborar políticas públicas desde la mirada de la juventud.
En quince días saldrá la segunda parte del artículo comentando la reunión departamental que tuvo lugar en la Vicepresidencia del Estado Plurinacional y cuyo motivo era la observación a la reglamentación de funciones del Consejo Plurinacional de la Juventud.
* Joven politólogo boliviano, @intirioja
1 En Septiembre del 2012 en Cochabamba, se realizó el “Primer encuentro Plurinacional de la Juventud” a cargo del Viceministerio de Igualdad de Oportunidades (VIO), el objetivo era socializar y aprobar el último borrador del entonces anteproyecto de Ley de la Juventud. Resultado del encuentro nació el Comité Plurinacional de la Juventud entidad política que debía darle seguimiento a la norma al interior de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
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