Buenos Aires-. El destacado politólogo y catedrático argentino Atilio Borón calificó hoy de otro fracaso el intento de un nuevo golpe de Estado en Venezuela al tiempo que consideró preocupante esta escalada de desestabilización en ese hermano país.
En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, el sociólogo resaltó que se trata de una tentativa absurda y hasta con tinte tragicómico ver a personajes de la derecha a la espera de que las masas populares los apoyaran, masas que, dijo, acudieron a rodear el Palacio de Miraflores para defender a su presidente legítimo Nicolás Maduro.
Están intentando de todas maneras torcer la voluntad popular por todos los medios y esto es muy preocupante porque van a seguir escalando en esta estrategia de desestabilización violenta que se agrega a la cruenta guerra económica que el país está sufriendo, apuntó.
Tras destacar la consciencia del pueblo venezolano, Borón remarcó que esto no es más que una desesperación. Intentan estas maniobras que salieron claramente muy mal el día de hoy. Hay que ver cual será la reacción del Gobierno, cómo va a actuar en relación con el opositor Leopoldo López, que violó el acuerdo que tenía de reclusión domiciliaria.
Una persona como él en cualquier otro país que haya cometido los crímenes que realizó estaría en una cárcel de máxima seguridad y con prisión perpetua por los hechos de las guarimbas de 2014, en los que fue el autor intelectual de esas tropelías que ocasionaron pérdidas de vidas humanas, agregó.
El catedrático remarcó que la tentativa de golpe fracasó. Sabemos todos de la unidad del pueblo y las Fuerzas Armadas y hay que seguir firmes en la solidaridad con el pueblo de Venezuela, porque el imperio seguirá intentando nuevas maniobras, manifestó.
En la madrugada de este martes un grupo de miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y dirigentes de la extrema derecha decidieron atrincherarse en la barriada de Altamira e intentan tomar la base militar de La Carlota.
El nuevo intento desestabilizador estuvo liderado por el autoproclamado presidente Juan Guaidó y el opositor Leopoldo López.
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