Por Miguel Ángel Marañón * -.
La toma militar y policial de la Embajada mexicana en Ecuador es un precedente nefasto para la convivencia en paz de los países de la Región. Debemos recordar que ni siquiera en guerras los países confrontados se atrevieron a tomar militarmente embajadas diplomáticas.
Esta intervención militar ecuatoriana a “territorio” mexicano (de acuerdo a la normativa internacional las embajadas diplomáticas son consideradas como territorio del país representado) no es algo inusual ni un “accidente”, está muy relacionado al proceder de los “libertarios” o más conocidos como “antisocialistas”.
No olvidemos cómo en la asonada de 2019 un grupo radical de los denominados “pititas” cercaron la embajada y domicilio de la embajadora de México con actitudes violentas. Destrozaron movilidades diplomáticas, se tomaron las atribuciones paramilitares o parapoliciales de revisar dichos vehículos, con el pretexto de que en esas movilidades podían “escapar” los masistas refugiados.
No conforme con demostrar la violencia que podían ejercer impunemente, pedían al entonces ministro de Gobierno, Arturo Murillo, que intervenga la Embajada mexicana, tal y como intervino el Gobierno ecuatoriano, ¿coincidencia?
Estos actos no solo son de violencia armada, sino también, como Milei, de insultos a presidentes electos democráticamente, como Petro y López Obrador, tachándolo de “ignorante”. En la formación diplomática no es posible que un mandatario insulte a su similar solo por no compartir sus ideas. Faltar al respeto a mandatarios es faltar el respeto a la población que los eligió.
Estos hechos tienen por finalidad establecer y convencer a los ciudadanos y entidades internacionales que todo accionar contra gobiernos progresistas o de “izquierda” está justificado y plenamente aprobado por una supuesta mayoría. Esto es parte de los golpes de Estados blandos. Parte de este discurso y accionar es calificar a estos gobiernos de dictadores, pese a que en una gran mayoría fueron electos por una amplia ventaja sobre los representantes de la ideología de los “libertarios”.
Estoy seguro que si se hubiera dado una intervención militar por parte del gobierno de Venezuela sobre la embajada de Ecuador las potencias mundiales ya estarían hablando de una intervención con los cascos azules. Pero como Noboa es “antisocialista” y libertario lo máximo que harán será una llamada de atención diplomática.
Todo este accionar de violencia coincide con las acciones de la Jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, quien declaró su preocupación por las inversiones realizadas por Rusia y China sobre todo en el triángulo del litio (Bolivia, Chile y Argentina). Una de sus principales propuestas fue que de alguna forma (legal o ilegal) se trate de censurar los canales periodísticos como ser Sputnik, Rusia Today (prensa rusa que están proscritos en Europa y los Estados Unidos), China Hoy y otros medios contrarios al país norteamericano que apoyan a gobiernos progresistas, porque cada día que pasa más ciudadanos latinos escuchan, leen y se informan a través de estos medios.
Los intereses económicos de las potencias mundiales en los recursos naturales son grandes y no les interesara derrocar gobiernos con golpes de Estados o desprestigiándolos para poder tener acceso a estas riquezas. No olvidemos cómo Elon Musk, con tal de apoderarse del litio, dijo: “daremos golpe de Estado a quien queramos”.
* Economista.
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