Bogotá-. Las masacres en Colombia aumentaron en 164 por ciento en 2018, advirtió hoy un informe de Naciones Unidas presentado en esta capital.
La Oficina en Colombia de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos y la representación del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, así lo hicieron ver en un documento de 17 páginas.
El texto del máximo organismo internacional señala que en 2017 hubo 11 masacres y el pasado año 29 casos, distribuidos entre los departamentos de Antioquia, Cauca, Norte de Santander y Caquetá.
Precisa la ONU que de las víctimas 110 eran defensores de los derechos humanos y líderes sociales, pertenecientes a pueblos indígenas y afrocolombianos, vinculados a labores de sustitución de cultivos ilícitos o a tareas de reivindicación de tierras afines con el Acuerdo de Paz.
Por tal motivo, la representación de Naciones Unidas en Colombia instó a acelerar la implementación del Acuerdo de Paz en los temas de reforma rural integral, reincorporación de los exguerrilleros a la sociedad y sustitución voluntaria de plantaciones de coca.
También trascendió que la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, le pidió al gobierno y al guerrillero Ejército de Liberación Nacional acordar un cese el fuego bilateral como antesala de una reactivación del diálogo de paz.
Sobre la Justicia Especial de Paz (JEP) la ONU pidió al presidente Iván Duque la urgente sanción de su ley estatutaria para que pueda funcionar de manera integral ese tribunal en el propósito de garantizar una paz estable y duradera en Colombia.
De ese modo se pronunció el representante en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Alberto Brunori, quien remarcó que ‘la construcción de una paz estable y duradera depende de la urgente sanción y promulgación, sin dilaciones, del proyecto de la ley estatutaria de la JEP’.
La JEP es garantía efectiva de los derechos de las víctimas a la verdad, a la justicia, a la reparación y a la no repetición de los horrores de la guerra, aseveró Brunori.
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