
Por Claudia Miranda Díaz * -.
Recuperada la democracia el 10 de octubre de 1982, el mandato de Hernán Siles Zuazo y Jaime Paz Zamora (MNRI-MIR), establecido para el periodo 1982-1986, fue acortado a 1985. A partir de 1985 y hasta 2005 se sucedieron 20 años de gobiernos neoliberales.
En ese periodo gobernaron: Víctor Paz Estensoro y Julio Garrett Ayllón, ambos del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) (1985-1989); Jaime Paz Zamora y Luis Ossio Sanjinés, del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y el Partido Demócrata Cristiano (PDC) (1989-1993); Gonzalo Sánchez de Lozada y Víctor Hugo Cárdenas, del MNR y el Movimiento Revolucionario Tupaj Katari de Liberación (MRTKL) (1993-1997).
El 12 de agosto de 1994, mediante Ley 1585, se realizaron Reformas a la Constitución Política del Estado. Una de ellas fue la ampliación de la gestión gubernamental de cuatro a cinco años (Art. 87). Hugo Banzer Suárez y Jorge Quiroga Ramírez, de la Acción Democrática Nacionalista (ADN), fueron electos para el período 1997-2002, pero, ante la enfermedad y posterior defunción de aquel, asumió la presidencia Quiroga –por Sucesión Constitucional– el 7 de agosto de 2001, hasta concluir el periodo presidencial en 2002. Gonzalo Sánchez de Lozada (MNR) fue electo para el período 2002 a 2007, sin embargo, su mandato culminó abruptamente en 2003, debido a las movilizaciones de la Guerra del Gas, que lo obligaron a renunciar el 17 de octubre, asumiendo la presidencia –por Sucesión Constitucional– Carlos Mesa Gisbert (Independiente), en su calidad de vicepresidente.
Los sucesos acaecidos entre septiembre y octubre de 2003 tienen como preámbulo “el impuestazo” que el gobierno de Sánchez de Lozada y Mesa pretendió implementar en febrero de ese mismo año, generando como consecuencia el “febrero negro”, con un resultado de 36 personas fallecidas (entre militares, policías, vecinos y estudiantes), y más de 200 heridos; además del saqueo y vandalismo en las calles. El proyecto de ley fue retirado, quedando el Gobierno desgastado.
Luego de la fallida tentativa del “impuestazo”, el Gobierno intentó exportar gas natural a Estados Unidos a través de puertos chilenos; este propósito fue el detonante para la Guerra del Gas, que indujo a Goni a renunciar el 17 de octubre de 2003.
¿Cómo empezaron las movilizaciones en defensa de nuestro recurso natural: el gas?
El 8 de septiembre campesinos de Batallas llegaron a La Paz exigiendo la liberación de un dirigente. El día 15, campesinos del Lago Titicaca bloquearon carreteras en contra de la exportación de gas por Chile. El día 18 los chóferes realizaron un paro de 24 horas en rechazo a la exportación de gas natural por Chile; la Fejuve de El Alto se suma con un paro cívico de 24 horas, a la que se adhirieron maestros rurales y colonizadores. El día 20 un convoy del Gobierno se dirigió a Sorata y se cruzó con bloqueadores en Warisata, en ese enfrentamiento murió una persona; más tarde, en Sorata, en un enfrentamiento los militares asesinaron a otras seis personas. El día 25 la Central Obrera Boliviana (COB) convocó a una Huelga Nacional, exigiendo la dimisión de Goni y en contra de la exportación de gas. El 29 se inició la Huelga General indefinida. El día 30 marcharon millares de personas de la ciudad de El Alto y La Paz en contra de la exportación de gas por Chile.
Ya en el mes de octubre, el día 3 se sumaron a las protestas los cocaleros de los Yungas y el Chapare. El día 8 El Alto acató el paro indefinido, con el saldo de dos muertos. Al día siguiente en El Alto mueren otras tres personas y 16 resultan heridas. El día11 el Gobierno ordena la militarización de la urbe alteña, amparado en el DS 27.209 de esa fecha, autorizando a las Fuerzas Armadas hacerse cargo del abastecimiento de combustibles y otros a la población. El día 12, enfrentamientos dejan 19 muertos. El día 13 la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) instruyó el bloqueo general de caminos a nivel nacional; Mesa abandona a Goni, tras la muerte de 20 personas en La Paz, El Alto y Santa Cruz; ese día el Presidente anuncia que no se venderá el gas al exterior en tanto no se realice una consulta a la población, decisión tardía, el pueblo pide su renuncia. El día 14 la Organización de Estados Americanos apoyó a Goni. El 15 tres mineros mueren en Patacamaya en choques con los militares; se inicia una huelga de hambre de intelectuales, artistas, periodistas y sacerdotes católicos en la ciudad de La Paz, misma que se extiende a nivel nacional (piden la renuncia de Goni). Goni, Jaime Paz y Manfred Reyes (la megacoalición) aceptan las demandas de un referéndum para el gas, Asamblea Constituyente y la revisión de la Ley de Hidrocarburos; ese día Manfred le pide al Presidente que renuncie. El día 16 más de 50 mil personas se reúnen en la Plaza San Francisco pidiendo la renuncia de Goni. El día 17 el primer mandatario junto a sus ministros de Defensa, Carlos Sánchez Berazaín, y de Salud, Javier Torres, abandona La Paz rumbo a Santa Cruz –dicen que pretendía gobernar desde allá–; envía un mensaje al Congreso, y la renuncia al cargo de Presidente.
De la oposición de la venta de gas –ante la dura represión gubernamental–, la consigna de lucha incluyó pedir la renuncia de Goni. El resultado de la Guerra del Gas dejó un saldo de 80 muertos y 400 heridos, según datos publicados en investigaciones de Clacso.
El 30 de agosto de 2011 el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) emitió una sentencia condenatoria en el Juicio de Responsabilidades contra cuatro excomandantes y 15 jefes militares, con penas de cárcel de entre 10 a 15 años por el delito de “genocidio bajo la modalidad de masacre sangrienta”, y a dos exministros a tres años de cárcel. Está pendiente la extradición de los principales actores de esta masacre: Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berazaín; quienes el 29 de agosto de 2011 consiguen en Estados Unidos una sentencia absolutoria.
Cabe recordar que Carlos Mesa, en enero de 2018, se negó a ser testigo de cargo en el juicio civil que las víctimas llevaron a cabo en Estados Unidos en contra de Goni y Sánchez Berazaín. En abril del mismo año ambos fueron declararon responsables por los sucesos de la masacre de octubre, ratificándose una indemnización de 10 millones de dólares a favor de las víctimas.
En memoria de los caídos en la Guerra del Gas, donde sucedió la masacre de octubre, Evo Morales, mediante Ley 424 del 17 de octubre de 2013, declaró “Día de la Dignidad Nacional” al 17 de octubre.
La Guerra del Agua (2000) y la Guerra del Gas (2003) fueron los inicios del fin del período neoliberal en Bolivia, abriendo el camino hacia la Asamblea Constituyente, a través de la cual se aprobó una Nueva Constitución Política, que puso fin a la República y dio paso al Estado Plurinacional.
* Economista y Auditor Financiero.
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