La Paz .- Diputados del oficialismo y la oposición afirmaron el jueves que el exmandatario Carlos Mesa abandonó el Gobierno en 2005 por su actitud «ambivalente» y al ser «incapaz» de atender las demandas del pueblo boliviano que, en ese entonces, sufría una crisis económica y social ocasionada por las políticas de privatización y entrega de recursos estratégicos del Estado a transnacionales.
«La historia lo recuerda así, como una persona ambivalente, alguien que no está dispuesto a enfrentar todos los desafíos y prefiere en estas lógicas de chantaje, amenazar con renunciar», dijo el diputado opositor Wilson Santamaría.
El legislador recordó que La Paz y, principalmente, El Alto fueron escenarios de las mayores manifestaciones que había en el país en demanda de la nacionalización de los hidrocarburos.
Mesa fue vicepresidente de Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003) y asumió la jefatura del Estado tras la renuncia y la fuga del entonces presidente después de los luctuosos sucesos de ‘octubre negro’, que dejaron el saldo de más de 60 muertos y cientos de heridos.
Entre 2003 y junio de 2005, Mesa «nunca construyó su gestión, abandonó el poder (…) y ojalá las nuevas generaciones tomen una decisión importante rumbo al proceso electoral de octubre», agregó Santamaría.
El exmandatario ahora busca retornar a la Presidencia como candidato de la alianza Comunidad Ciudadana (CC), que marcha segundo en las encuestas con un 27%, por detrás del presidente Evo Morales con un 38% en la intención de voto.
Tras ganar las elecciones de 2005 por amplia mayoría, Morales se convirtió en 2006 el primer presidente indígena en la historia boliviana y puso en marcha una serie de medidas de corte socialista, nacionalizó los recursos y empresas estratégicas del Estado y sacó a Bolivia de la miseria, relievó el diputado oficialista Lino Cárdenas.
La historia nuestra a Mesa como «una persona totalmente incapaz, sometida a mandatos externos, muestra que no tiene una personalidad y una decisión como para administrar el país, eso lo que nos ha dejado en ese momento Carlos Mesa al margen de desoír profundamente al pueblo de Bolivia», dijo.
El 6 de junio de 2005, Mesa anunció su dimisión en un mensaje por radio y televisión: «Quiero primero expresarle a la Patria mi disculpa si no he sido capaz de conducirla adecuadamente», dijo.
Mesa permaneció casi 20 meses en la Presidencia y su gobierno estuvo caracterizado por una aguda inestabilidad económica y no pudo sofocar la ola de protestas sociales en el país.
«¿Qué podría ofrecernos ahora Carlos Meza? ¿Cómo podría ser creíble si él cuando tuvo la oportunidad de hacer lo que ahora prédica, no lo ha podido cumplir? Aquí hay una doble moral», señaló Cárdenas.
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